La anticoncepción es la forma de prevenir un embarazo no deseado, a la anticoncepción se le conoce también como control de la natalidad o planificación familiar.
El embarazo en la mujer puede darse a través de la primera menstruación y hasta aproximadamente alrededor de los 40 o 45 años; la anticoncepción ayuda a la mujer a planificar sus embarazos, los métodos anticonceptivos pueden ser usados tanto por la mujer como por su pareja. Algunos de estos métodos ayudan también a protegerse de enfermedades de transmisión sexual (ETS) y también del SIDA o VIH.
Existen varios métodos para el control de la natalidad, todos tienen sus ventajas y desventajas y otros son mejor para la anticoncepción. Cada método funciona de manera distinta. Hay algunos que evitan que el esperma llegue al óvulo, otros que destruyen el esperma, otros que evitan que se liberen óvulos, algunos modifican la membrana mucosa que recubre el útero, etc.
Los métodos anticonceptivos se dividen en:
- Métodos de barrera
- Hormonales
- Dispositivos intrauterinos
- Esterilización
- Planificación natural
Los métodos de barrera incluyen condones, espermicidas, el diafragma y el capuchón cervical. Algunos protegen contra ETS.
Los métodos hormonales abarcan desde pastillas anticonceptivas, parches, inyecciones, anillos vaginales, dispositivos. Para planificar son los más efectivos. Hay anticonceptivos que se indican durante la lactancia.
El dispositivo Intrauterino (DIU) previene el embarazo, se coloca dentro del útero y puede permanecer entre 5 ó 10 años dentro del útero dependiendo del tipo de DIU. en cualquier momento se puede retirar si es que se desea embarazarse.
La esterilización puede realizarse tanto en el hombre como la mujer, este método bloquea permanentemente el paso de óvulos o esperma. Este, método es ideal para parejas que no piensan tener más hijos a futuro.
Se debe consultar al médico para elegir el método que más les conviene como pareja, algunos métodos de prevención de embarazo demuestran más eficacia que otros. Es importante tener en cuenta los siguientes puntos a la hora de elegir: La salud, frecuencia en que se tienen relaciones, cuándo quieren tener hijos, efectividad del método a elegir, si protege contra ETS y SIDA, costo y si se sienten cómodos con el método a utilizar.
Es importante acudir en busca de ayuda profesional y no sentir vergüenza al hablar o preguntar, su médico está para ayudarlo.